Solía sostener que la peor película era "Yo soy el que tú buscas". Lo decía subjetivamente, sin saber nada de cine ni compararla con las tantas otras que seguro son más malas. Era la peor porque no me gustaba y la había visto muchas veces.
Ayer la vi otra vez, de principio a fin. Tiene de todo: una mujer violada, una fiesta de disfraces, un sanatorio para obsesos sexuales, una lágrima ardiente que incendia la alfombra, un travesti panzón enamorado de la protagonista, una combustión espontánea que le da al ya referido travesti panzón, un hombre llamado Bob y una estrecha relación con García Márquez. Es tan mala que hasta es buena. Le tomó seis veces de verla completa para convencerme, pero ya lo logró. La voy a poner entre mis favoritas. Qué sorpresa: los exitos de la perseverancia, el convencimiento por repetición.
2 comentarios:
Mm.
Y dime, esta película... ¿La viste en el canal de las estrellas o en el canal 9? ¿Mientras calentabas tus alimentos en una hoguera, o después de comer?
¿Tus posts los escribes primero en bloc de notas o en papel bond?
Nunca te volveré a ver con los mismos ojos, la verdad. Nada volverá a ser igual entre nosotros dos.
(No cierto. Es que sigo buscando pelea por la internet. Pero nadie quiere presentármela. Maricones.)
Mi querida Andrómeda...
Sin saberlo me había encontrado contigo en varias ocasiones en este espacio cybernético...o blegernético, pero no había dado tiempo a leer tu blog...
Ahora que he caido de nuevo.. y que ambas padecemos de blogitis, me permito estar de acuerdo contigo...
Acaso no es así que aprendemos a odiar la escuela? por la constante repetición de años incansables en las aulas, con maestros insufribles y compañeros enfadosos...en fin
Amén por la repetición
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